OBITUARIO: Alberto Zedda, el eterno espíritu rossiniano por Pablo Ruiz

Alberto Zedda
Alberto Zedda

Existe un espíritu rossiniano que es eterno. El que durante tantos años ha enseñado el maestro. Es el espíritu de la sabiduría y la sensibilidad. Cerramos los ojos y lo vemos con claridad. Su caminar pequeño, su sonrisa iluminada, la mirada entrecerrada. Abre sus manos, nos enseña y nos conmueve. Suena Rossini. Se inicia siempre piano, con dirección. Se juega con los matices y los colores de la voz según su intención musical y literaria porque hay que dar sentido y carácter a las palabras creando así el personaje en la ópera. Rossini es trasparente, es claro, se tiene que oír y se tiene que ver. Es el único modo de mantener esa belleza continua. El maestro ha dado eternidad a su conocimiento. La música fue su vida, Rossini su pasión. Su entusiasmo, la herencia de cientos de cantantes en el mundo que sienten la ópera con la misma sonrisa iluminada, la mirada entrecerrada, llenos de magia musical y espiritual. 

Gracias maestro Alberto Zedda.
 
Pablo Ruiz