Crítica de Tosca de PucciniCfrítica de Tosca de PucciniCfrítica de Tosca de PucciniCfrítica de Tosca de PucciniCfrítica de Tosca de Puccini

OPERA DE VIENA,  23 NOVIEMBRE 2012

«Vittoria, Vittoria» Neil Shicoff  un Cavaradossi que sigue emocionando.

Regresando de Paris con la euforia del gran triunfo de Celso Albelo nos dirigimos de nuevo a nuestra casa, la Opera de Viena, para escuchar al gran tenor Neil Shicoff (el mejor Cavaradossi que jamás he escuchado) en uno de sus roles favoritos, cinco años después.

En la memoria las funciones de «Tosca» del 2007 protagonizadas por Shicoff con una «Recondita armonia» impecable de ejecución, una «Vittoria» que se alargo una eternidad y un «E lucevan le stelle» tan intenso y emocionante que con razón han hecho del tenor americano el mejor Cavaradossi de los últimos años.

Hay tenores que llegan a cantar muy bien pero Shicoff además, siempre consigue emocionar.

– Sciarrone; el barítono Mihail Dogotari que cumplió tanto en la parte cantada como en la dramática.

– Spoletta; el tenor ligero Benedikt Kobel sin duda alguna el peor Spoletta que he escuchado en toda mi vida. Además de no tener voz y de cantar mal  llega incluso a desafinar. No tiene nivel para un teatro como la Opera de Viena. Si queremos que la Wiener Staatsoper siga siendo el mejor teatro de ópera del mundo tenemos que cuidar ciertos detalles: voces tan mediocres que lo único que hacen es cerrar el paso a jóvenes cantantes que vendrían con ilusión, ganas de aprender y mejorar no tienen sitio en un coso operístico de esta categoría. El irregular Ensemble para roles secundarios herencia de la anterior dirección esperemos que sea corregido por el actual director, el señor Dominique Meyer, para la temporada que viene. Hay mucho cantante joven esperando una oportunidad así que no hay excusas.

– Angelotti; el gran bajo Janusz Monarcha que posee una gran voz y va sobrado para este papel secundario. Todo un lujo.

-Sacristán; el Kammersänger KS Alfred Sramek que lleva cantando el papel más de 20 años. Es un gran actor y emociona como siempre con su intervención junto al tenor en el aria «Recondita armonia».

– Scarpia; el veterano barítono Falk Struckmann (debutó  como Scarpia en Viena en el año 2000) que estuvo brillante en el Te Deum del primer acto y aunque cometió algún pequeño fallo vocal en el segundo acto sigue siendo un gran Scarpia que merece todos nuestros respetos pese a que esa noche no brillo como en otras ocasiones. El generoso público de Viena le aplaudió mucho debido a su gran trayectoria cuando salió a saludar al finalizar el segundo acto.

– Floria Tosca; la soprano norteamericana Emily Magee que debutaba en la serie como Tosca (debut el pasado 16 de noviembre) posee una gran técnica y una bonita voz aunque no la termino de ver del todo en este difícil rol. Su voz no es muy grande y aunque estuvo muy segura en los agudos se echo de menos la potencia vocal a la que las grandes intérpretes de Tosca nos tienen acostumbrados. Puccini, un compositor demasiado exigente con las voces femeninas, sigue siendo un barómetro muy valido a la hora de diferenciar a las buenas cantantes de las grandes intérpretes que han marcado una época. Habrá que seguir escuchándola en otros papeles más adecuados a sus cualidades vocales donde seguramente brillara mas. Destaco en la faceta dramática, cumplió en el aria «Vissi d’ arte» y ofreció sus mejores momentos al final del tercer acto.

– Mario Cavaradossi; el tenor KS (Kammersänger) Neil Shicoff que pese a la edad ( 62 años y más de 35  de carrera) sigue siendo el mejor Cavaradossi del panorama lírico actual. Me faltan adjetivos para calificar a uno de los mejores tenores que he visto  sobre un escenario, al artífice, junto al gran maestro Alfredo Kraus de que ame la Opera. Shicoff ha sido el mejor Hoffmann, Edgardo, Cavaradossi, Ernani, Lenski, Gustavo III, des Grieux y Hermann de los ultimos años y sin duda alguna el mejor Eleazar de la Historia. Su interpretación del aria “Rachel quand du Seigneur“  es la cosa más impresionante que he escuchado jamás en un teatro.

Aunque no es el Shicoff de tiempos pasados interpretó en el primer acto el aria “Recondita armonia“ a un gran nivel (olvidándose de lo que la dirección artística ordena y dirigiendo la voz hacia el público en todo momento como a los apasionados aficionados les gusta) y estuvo muy brillante en los dúos con la soprano. En el segundo acto tenemos que destacar su increíble y siempre intensa „Vittoria, Vittoria“ que para el tiempo ya que dura una eternidad (una de las aportaciones de este gran tenor a la historia del género). Y en el tercer acto el milagro operístico: el tenor americano que estaba cantando bastante bien aunque no con la fuerza y el poder de hace años nos regaló una interpretación de la archiconocida aria “E lucevan le stelle“  para el recuerdo. ¿Cómo se puede cantar e interpretar al joven Cavaradossi de esa manera a su edad? ¿Cómo puede un cantante con 62 años seguir emocionando vocalmente tanto?  Qué gran voz, qué interpretación, qué emoción, qué sentimiento, qué intensidad y qué manera de alargar las notas hasta el infinito… Bordó un tercer acto con un “O dolci mani…“   impresionante que por momentos nos recordaron a las “Toscas“ que hace años nos brindó este grandioso tenor, en nuestra opinión el mejor Mario Cavaradossi de los últimos tiempos.

– Director; Philippe Auguin dio una lección de cómo se tiene que dirigir a Puccini. Llevo a la orquesta con maestría y con los tempos adecuados haciendo que sonara con una gran fuerza e intensidad cuando la obra del genio de Lucca lo requería pero eso si, respetando en todo momento la labor de los cantantes.

Transmitió en todo momento haciendo que la orquesta, plagada de miembros de la Filarmónica de Viena asiduos a los conciertos de Año Nuevo (como el concertino Rainer Küchl con su inseparable Stradivarius) sonara con una calidad como pocas veces habíamos visto y regaló al público un final apoteósico y emocionante. Bravo señor Auguin: así se dirige a Puccini.

Tanto vocalmente como por interpretación y emoción Shicoff (nunca he visto a un tenor una entrega tan intensa llegando incluso al límite en la parte dramática) es un gran artista que siempre deja huella en la memoria de los espectadores. Para siempre quedarán sus actuaciones memorables plagadas de mágicos momentos en los que alargaba las notas hasta lo imposible. Sin duda alguna ha sido el mejor tenor lírico-spinto de la pasada década con roles e interpretaciones que permanecerán para siempre en la memoria de los grandes aficionados. Hablamos de un cantante que siempre ha enamorado y emocionado con sus intensas interpretaciones y con la calidad de su voz.

Gracias KS Neil Shicoff por las actuaciones que nos ha regalado en la Opera de Viena durante las últimas 16 temporadas y por esta última gran noche donde elevó el listón a lo más alto en el adiós a la vida.

José NogueiraOPERA DE VIENA,  23 NOVIEMBRE 2012

«Vittoria, Vittoria» Neil Shicoff  un Cavaradossi que sigue emocionando.

Regresando de Paris con la euforia del gran triunfo de Celso Albelo nos dirigimos de nuevo a nuestra casa, la Opera de Viena, para escuchar al gran tenor Neil Shicoff (el mejor Cavaradossi que jamás he escuchado) en uno de sus roles favoritos, cinco años después.

 

En la memoria las funciones de «Tosca» del 2007 protagonizadas por Shicoff con una «Recondita armonia» impecable de ejecución, una «Vittoria» que se alargo una eternidad y un «E lucevan le stelle» tan intenso y emocionante que con razón han hecho del tenor americano el mejor Cavaradossi de los últimos años.

 

Hay tenores que llegan a cantar muy bien pero Shicoff además, siempre consigue emocionar.

 

– Sciarrone; el barítono Mihail Dogotari que cumplió tanto en la parte cantada como en la dramática.

 

– Spoletta; el tenor ligero Benedikt Kobel sin duda alguna el peor Spoletta que he escuchado en toda mi vida. Además de no tener voz y de cantar mal  llega incluso a desafinar. No tiene nivel para un teatro como la Opera de Viena. Si queremos que la Wiener Staatsoper siga siendo el mejor teatro de ópera del mundo tenemos que cuidar ciertos detalles: voces tan mediocres que lo único que hacen es cerrar el paso a jóvenes cantantes que vendrían con ilusión, ganas de aprender y mejorar no tienen sitio en un coso operístico de esta categoría. El irregular Ensemble para roles secundarios herencia de la anterior dirección esperemos que sea corregido por el actual director, el señor Dominique Meyer, para la temporada que viene. Hay mucho cantante joven esperando una oportunidad así que no hay excusas.

 

– Angelotti; el gran bajo Janusz Monarcha que posee una gran voz y va sobrado para este papel secundario. Todo un lujo.

 

-Sacristán; el Kammersänger KS Alfred Sramek que lleva cantando el papel más de 20 años. Es un gran actor y emociona como siempre con su intervención junto al tenor en el aria «Recondita armonia».

 

– Scarpia; el veterano barítono Falk Struckmann (debutó  como Scarpia en Viena en el año 2000) que estuvo brillante en el Te Deum del primer acto y aunque cometió algún pequeño fallo vocal en el segundo acto sigue siendo un gran Scarpia que merece todos nuestros respetos pese a que esa noche no brillo como en otras ocasiones. El generoso público de Viena le aplaudió mucho debido a su gran trayectoria cuando salió a saludar al finalizar el segundo acto.

 

– Floria Tosca; la soprano norteamericana Emily Magee que debutaba en la serie como Tosca (debut el pasado 16 de noviembre) posee una gran técnica y una bonita voz aunque no la termino de ver del todo en este difícil rol. Su voz no es muy grande y aunque estuvo muy segura en los agudos se echo de menos la potencia vocal a la que las grandes intérpretes de Tosca nos tienen acostumbrados. Puccini, un compositor demasiado exigente con las voces femeninas, sigue siendo un barómetro muy valido a la hora de diferenciar a las buenas cantantes de las grandes intérpretes que han marcado una época. Habrá que seguir escuchándola en otros papeles más adecuados a sus cualidades vocales donde seguramente brillara mas. Destaco en la faceta dramática, cumplió en el aria «Vissi d’ arte» y ofreció sus mejores momentos al final del tercer acto.

 

– Mario Cavaradossi; el tenor KS (Kammersänger) Neil Shicoff que pese a la edad ( 62 años y más de 35  de carrera) sigue siendo el mejor Cavaradossi del panorama lírico actual. Me faltan adjetivos para calificar a uno de los mejores tenores que he visto  sobre un escenario, al artífice, junto al gran maestro Alfredo Kraus de que ame la Opera. Shicoff ha sido el mejor Hoffmann, Edgardo, Cavaradossi, Ernani, Lenski, Gustavo III, des Grieux y Hermann de los ultimos años y sin duda alguna el mejor Eleazar de la Historia. Su interpretación del aria “Rachel quand du Seigneur“  es la cosa más impresionante que he escuchado jamás en un teatro.

 

Aunque no es el Shicoff de tiempos pasados interpretó en el primer acto el aria “Recondita armonia“ a un gran nivel (olvidándose de lo que la dirección artística ordena y dirigiendo la voz hacia el público en todo momento como a los apasionados aficionados les gusta) y estuvo muy brillante en los dúos con la soprano. En el segundo acto tenemos que destacar su increíble y siempre intensa „Vittoria, Vittoria“ que para el tiempo ya que dura una eternidad (una de las aportaciones de este gran tenor a la historia del género). Y en el tercer acto el milagro operístico: el tenor americano que estaba cantando bastante bien aunque no con la fuerza y el poder de hace años nos regaló una interpretación de la archiconocida aria “E lucevan le stelle“  para el recuerdo. ¿Cómo se puede cantar e interpretar al joven Cavaradossi de esa manera a su edad? ¿Cómo puede un cantante con 62 años seguir emocionando vocalmente tanto?  Qué gran voz, qué interpretación, qué emoción, qué sentimiento, qué intensidad y qué manera de alargar las notas hasta el infinito… Bordó un tercer acto con un “O dolci mani…“   impresionante que por momentos nos recordaron a las “Toscas“ que hace años nos brindó este grandioso tenor, en nuestra opinión el mejor Mario Cavaradossi de los últimos tiempos.

 

– Director; Philippe Auguin dio una lección de cómo se tiene que dirigir a Puccini. Llevo a la orquesta con maestría y con los tempos adecuados haciendo que sonara con una gran fuerza e intensidad cuando la obra del genio de Lucca lo requería pero eso si, respetando en todo momento la labor de los cantantes.

 

Transmitió en todo momento haciendo que la orquesta, plagada de miembros de la Filarmónica de Viena asiduos a los conciertos de Año Nuevo (como el concertino Rainer Küchl con su inseparable Stradivarius) sonara con una calidad como pocas veces habíamos visto y regaló al público un final apoteósico y emocionante. Bravo señor Auguin: así se dirige a Puccini.

 

Tanto vocalmente como por interpretación y emoción Shicoff (nunca he visto a un tenor una entrega tan intensa llegando incluso al límite en la parte dramática) es un gran artista que siempre deja huella en la memoria de los espectadores. Para siempre quedarán sus actuaciones memorables plagadas de mágicos momentos en los que alargaba las notas hasta lo imposible. Sin duda alguna ha sido el mejor tenor lírico-spinto de la pasada década con roles e interpretaciones que permanecerán para siempre en la memoria de los grandes aficionados. Hablamos de un cantante que siempre ha enamorado y emocionado con sus intensas interpretaciones y con la calidad de su voz.

 

Gracias KS Neil Shicoff por las actuaciones que nos ha regalado en la Opera de Viena durante las últimas 16 temporadas y por esta última gran noche donde elevó el listón a lo más alto en el adiós a la vida.

 

 

 

JOSE NOGUEIRA

 

 

 OPERA DE VIENA,  23 NOVIEMBRE 2012

«Vittoria, Vittoria» Neil Shicoff  un Cavaradossi que sigue emocionando.

Regresando de Paris con la euforia del gran triunfo de Celso Albelo nos dirigimos de nuevo a nuestra casa, la Opera de Viena, para escuchar al gran tenor Neil Shicoff (el mejor Cavaradossi que jamás he escuchado) en uno de sus roles favoritos, cinco años después.

 

En la memoria las funciones de «Tosca» del 2007 protagonizadas por Shicoff con una «Recondita armonia» impecable de ejecución, una «Vittoria» que se alargo una eternidad y un «E lucevan le stelle» tan intenso y emocionante que con razón han hecho del tenor americano el mejor Cavaradossi de los últimos años.

 

Hay tenores que llegan a cantar muy bien pero Shicoff además, siempre consigue emocionar.

 

– Sciarrone; el barítono Mihail Dogotari que cumplió tanto en la parte cantada como en la dramática.

 

– Spoletta; el tenor ligero Benedikt Kobel sin duda alguna el peor Spoletta que he escuchado en toda mi vida. Además de no tener voz y de cantar mal  llega incluso a desafinar. No tiene nivel para un teatro como la Opera de Viena. Si queremos que la Wiener Staatsoper siga siendo el mejor teatro de ópera del mundo tenemos que cuidar ciertos detalles: voces tan mediocres que lo único que hacen es cerrar el paso a jóvenes cantantes que vendrían con ilusión, ganas de aprender y mejorar no tienen sitio en un coso operístico de esta categoría. El irregular Ensemble para roles secundarios herencia de la anterior dirección esperemos que sea corregido por el actual director, el señor Dominique Meyer, para la temporada que viene. Hay mucho cantante joven esperando una oportunidad así que no hay excusas.

 

– Angelotti; el gran bajo Janusz Monarcha que posee una gran voz y va sobrado para este papel secundario. Todo un lujo.

 

-Sacristán; el Kammersänger KS Alfred Sramek que lleva cantando el papel más de 20 años. Es un gran actor y emociona como siempre con su intervención junto al tenor en el aria «Recondita armonia».

 

– Scarpia; el veterano barítono Falk Struckmann (debutó  como Scarpia en Viena en el año 2000) que estuvo brillante en el Te Deum del primer acto y aunque cometió algún pequeño fallo vocal en el segundo acto sigue siendo un gran Scarpia que merece todos nuestros respetos pese a que esa noche no brillo como en otras ocasiones. El generoso público de Viena le aplaudió mucho debido a su gran trayectoria cuando salió a saludar al finalizar el segundo acto.

 

– Floria Tosca; la soprano norteamericana Emily Magee que debutaba en la serie como Tosca (debut el pasado 16 de noviembre) posee una gran técnica y una bonita voz aunque no la termino de ver del todo en este difícil rol. Su voz no es muy grande y aunque estuvo muy segura en los agudos se echo de menos la potencia vocal a la que las grandes intérpretes de Tosca nos tienen acostumbrados. Puccini, un compositor demasiado exigente con las voces femeninas, sigue siendo un barómetro muy valido a la hora de diferenciar a las buenas cantantes de las grandes intérpretes que han marcado una época. Habrá que seguir escuchándola en otros papeles más adecuados a sus cualidades vocales donde seguramente brillara mas. Destaco en la faceta dramática, cumplió en el aria «Vissi d’ arte» y ofreció sus mejores momentos al final del tercer acto.

 

– Mario Cavaradossi; el tenor KS (Kammersänger) Neil Shicoff que pese a la edad ( 62 años y más de 35  de carrera) sigue siendo el mejor Cavaradossi del panorama lírico actual. Me faltan adjetivos para calificar a uno de los mejores tenores que he visto  sobre un escenario, al artífice, junto al gran maestro Alfredo Kraus de que ame la Opera. Shicoff ha sido el mejor Hoffmann, Edgardo, Cavaradossi, Ernani, Lenski, Gustavo III, des Grieux y Hermann de los ultimos años y sin duda alguna el mejor Eleazar de la Historia. Su interpretación del aria “Rachel quand du Seigneur“  es la cosa más impresionante que he escuchado jamás en un teatro.

 

Aunque no es el Shicoff de tiempos pasados interpretó en el primer acto el aria “Recondita armonia“ a un gran nivel (olvidándose de lo que la dirección artística ordena y dirigiendo la voz hacia el público en todo momento como a los apasionados aficionados les gusta) y estuvo muy brillante en los dúos con la soprano. En el segundo acto tenemos que destacar su increíble y siempre intensa „Vittoria, Vittoria“ que para el tiempo ya que dura una eternidad (una de las aportaciones de este gran tenor a la historia del género). Y en el tercer acto el milagro operístico: el tenor americano que estaba cantando bastante bien aunque no con la fuerza y el poder de hace años nos regaló una interpretación de la archiconocida aria “E lucevan le stelle“  para el recuerdo. ¿Cómo se puede cantar e interpretar al joven Cavaradossi de esa manera a su edad? ¿Cómo puede un cantante con 62 años seguir emocionando vocalmente tanto?  Qué gran voz, qué interpretación, qué emoción, qué sentimiento, qué intensidad y qué manera de alargar las notas hasta el infinito… Bordó un tercer acto con un “O dolci mani…“   impresionante que por momentos nos recordaron a las “Toscas“ que hace años nos brindó este grandioso tenor, en nuestra opinión el mejor Mario Cavaradossi de los últimos tiempos.

 

– Director; Philippe Auguin dio una lección de cómo se tiene que dirigir a Puccini. Llevo a la orquesta con maestría y con los tempos adecuados haciendo que sonara con una gran fuerza e intensidad cuando la obra del genio de Lucca lo requería pero eso si, respetando en todo momento la labor de los cantantes.

 

Transmitió en todo momento haciendo que la orquesta, plagada de miembros de la Filarmónica de Viena asiduos a los conciertos de Año Nuevo (como el concertino Rainer Küchl con su inseparable Stradivarius) sonara con una calidad como pocas veces habíamos visto y regaló al público un final apoteósico y emocionante. Bravo señor Auguin: así se dirige a Puccini.

 

Tanto vocalmente como por interpretación y emoción Shicoff (nunca he visto a un tenor una entrega tan intensa llegando incluso al límite en la parte dramática) es un gran artista que siempre deja huella en la memoria de los espectadores. Para siempre quedarán sus actuaciones memorables plagadas de mágicos momentos en los que alargaba las notas hasta lo imposible. Sin duda alguna ha sido el mejor tenor lírico-spinto de la pasada década con roles e interpretaciones que permanecerán para siempre en la memoria de los grandes aficionados. Hablamos de un cantante que siempre ha enamorado y emocionado con sus intensas interpretaciones y con la calidad de su voz.

 

Gracias KS Neil Shicoff por las actuaciones que nos ha regalado en la Opera de Viena durante las últimas 16 temporadas y por esta última gran noche donde elevó el listón a lo más alto en el adiós a la vida.

 

 

 

JOSE NOGUEIRA

 

 

 OPERA DE VIENA,  23 NOVIEMBRE 2012

«Vittoria, Vittoria» Neil Shicoff  un Cavaradossi que sigue emocionando.

Regresando de Paris con la euforia del gran triunfo de Celso Albelo nos dirigimos de nuevo a nuestra casa, la Opera de Viena, para escuchar al gran tenor Neil Shicoff (el mejor Cavaradossi que jamás he escuchado) en uno de sus roles favoritos, cinco años después.

 

En la memoria las funciones de «Tosca» del 2007 protagonizadas por Shicoff con una «Recondita armonia» impecable de ejecución, una «Vittoria» que se alargo una eternidad y un «E lucevan le stelle» tan intenso y emocionante que con razón han hecho del tenor americano el mejor Cavaradossi de los últimos años.

 

Hay tenores que llegan a cantar muy bien pero Shicoff además, siempre consigue emocionar.

 

– Sciarrone; el barítono Mihail Dogotari que cumplió tanto en la parte cantada como en la dramática.

 

– Spoletta; el tenor ligero Benedikt Kobel sin duda alguna el peor Spoletta que he escuchado en toda mi vida. Además de no tener voz y de cantar mal  llega incluso a desafinar. No tiene nivel para un teatro como la Opera de Viena. Si queremos que la Wiener Staatsoper siga siendo el mejor teatro de ópera del mundo tenemos que cuidar ciertos detalles: voces tan mediocres que lo único que hacen es cerrar el paso a jóvenes cantantes que vendrían con ilusión, ganas de aprender y mejorar no tienen sitio en un coso operístico de esta categoría. El irregular Ensemble para roles secundarios herencia de la anterior dirección esperemos que sea corregido por el actual director, el señor Dominique Meyer, para la temporada que viene. Hay mucho cantante joven esperando una oportunidad así que no hay excusas.

 

– Angelotti; el gran bajo Janusz Monarcha que posee una gran voz y va sobrado para este papel secundario. Todo un lujo.

 

-Sacristán; el Kammersänger KS Alfred Sramek que lleva cantando el papel más de 20 años. Es un gran actor y emociona como siempre con su intervención junto al tenor en el aria «Recondita armonia».

 

– Scarpia; el veterano barítono Falk Struckmann (debutó  como Scarpia en Viena en el año 2000) que estuvo brillante en el Te Deum del primer acto y aunque cometió algún pequeño fallo vocal en el segundo acto sigue siendo un gran Scarpia que merece todos nuestros respetos pese a que esa noche no brillo como en otras ocasiones. El generoso público de Viena le aplaudió mucho debido a su gran trayectoria cuando salió a saludar al finalizar el segundo acto.

 

– Floria Tosca; la soprano norteamericana Emily Magee que debutaba en la serie como Tosca (debut el pasado 16 de noviembre) posee una gran técnica y una bonita voz aunque no la termino de ver del todo en este difícil rol. Su voz no es muy grande y aunque estuvo muy segura en los agudos se echo de menos la potencia vocal a la que las grandes intérpretes de Tosca nos tienen acostumbrados. Puccini, un compositor demasiado exigente con las voces femeninas, sigue siendo un barómetro muy valido a la hora de diferenciar a las buenas cantantes de las grandes intérpretes que han marcado una época. Habrá que seguir escuchándola en otros papeles más adecuados a sus cualidades vocales donde seguramente brillara mas. Destaco en la faceta dramática, cumplió en el aria «Vissi d’ arte» y ofreció sus mejores momentos al final del tercer acto.

 

– Mario Cavaradossi; el tenor KS (Kammersänger) Neil Shicoff que pese a la edad ( 62 años y más de 35  de carrera) sigue siendo el mejor Cavaradossi del panorama lírico actual. Me faltan adjetivos para calificar a uno de los mejores tenores que he visto  sobre un escenario, al artífice, junto al gran maestro Alfredo Kraus de que ame la Opera. Shicoff ha sido el mejor Hoffmann, Edgardo, Cavaradossi, Ernani, Lenski, Gustavo III, des Grieux y Hermann de los ultimos años y sin duda alguna el mejor Eleazar de la Historia. Su interpretación del aria “Rachel quand du Seigneur“  es la cosa más impresionante que he escuchado jamás en un teatro.

 

Aunque no es el Shicoff de tiempos pasados interpretó en el primer acto el aria “Recondita armonia“ a un gran nivel (olvidándose de lo que la dirección artística ordena y dirigiendo la voz hacia el público en todo momento como a los apasionados aficionados les gusta) y estuvo muy brillante en los dúos con la soprano. En el segundo acto tenemos que destacar su increíble y siempre intensa „Vittoria, Vittoria“ que para el tiempo ya que dura una eternidad (una de las aportaciones de este gran tenor a la historia del género). Y en el tercer acto el milagro operístico: el tenor americano que estaba cantando bastante bien aunque no con la fuerza y el poder de hace años nos regaló una interpretación de la archiconocida aria “E lucevan le stelle“  para el recuerdo. ¿Cómo se puede cantar e interpretar al joven Cavaradossi de esa manera a su edad? ¿Cómo puede un cantante con 62 años seguir emocionando vocalmente tanto?  Qué gran voz, qué interpretación, qué emoción, qué sentimiento, qué intensidad y qué manera de alargar las notas hasta el infinito… Bordó un tercer acto con un “O dolci mani…“   impresionante que por momentos nos recordaron a las “Toscas“ que hace años nos brindó este grandioso tenor, en nuestra opinión el mejor Mario Cavaradossi de los últimos tiempos.

 

– Director; Philippe Auguin dio una lección de cómo se tiene que dirigir a Puccini. Llevo a la orquesta con maestría y con los tempos adecuados haciendo que sonara con una gran fuerza e intensidad cuando la obra del genio de Lucca lo requería pero eso si, respetando en todo momento la labor de los cantantes.

 

Transmitió en todo momento haciendo que la orquesta, plagada de miembros de la Filarmónica de Viena asiduos a los conciertos de Año Nuevo (como el concertino Rainer Küchl con su inseparable Stradivarius) sonara con una calidad como pocas veces habíamos visto y regaló al público un final apoteósico y emocionante. Bravo señor Auguin: así se dirige a Puccini.

 

Tanto vocalmente como por interpretación y emoción Shicoff (nunca he visto a un tenor una entrega tan intensa llegando incluso al límite en la parte dramática) es un gran artista que siempre deja huella en la memoria de los espectadores. Para siempre quedarán sus actuaciones memorables plagadas de mágicos momentos en los que alargaba las notas hasta lo imposible. Sin duda alguna ha sido el mejor tenor lírico-spinto de la pasada década con roles e interpretaciones que permanecerán para siempre en la memoria de los grandes aficionados. Hablamos de un cantante que siempre ha enamorado y emocionado con sus intensas interpretaciones y con la calidad de su voz.

 

Gracias KS Neil Shicoff por las actuaciones que nos ha regalado en la Opera de Viena durante las últimas 16 temporadas y por esta última gran noche donde elevó el listón a lo más alto en el adiós a la vida.

 

 

 

JOSE NOGUEIRA

 

 

 OPERA DE VIENA,  23 NOVIEMBRE 2012

«Vittoria, Vittoria» Neil Shicoff  un Cavaradossi que sigue emocionando.

Regresando de Paris con la euforia del gran triunfo de Celso Albelo nos dirigimos de nuevo a nuestra casa, la Opera de Viena, para escuchar al gran tenor Neil Shicoff (el mejor Cavaradossi que jamás he escuchado) en uno de sus roles favoritos, cinco años después.

 

En la memoria las funciones de «Tosca» del 2007 protagonizadas por Shicoff con una «Recondita armonia» impecable de ejecución, una «Vittoria» que se alargo una eternidad y un «E lucevan le stelle» tan intenso y emocionante que con razón han hecho del tenor americano el mejor Cavaradossi de los últimos años.

 

Hay tenores que llegan a cantar muy bien pero Shicoff además, siempre consigue emocionar.

 

– Sciarrone; el barítono Mihail Dogotari que cumplió tanto en la parte cantada como en la dramática.

 

– Spoletta; el tenor ligero Benedikt Kobel sin duda alguna el peor Spoletta que he escuchado en toda mi vida. Además de no tener voz y de cantar mal  llega incluso a desafinar. No tiene nivel para un teatro como la Opera de Viena. Si queremos que la Wiener Staatsoper siga siendo el mejor teatro de ópera del mundo tenemos que cuidar ciertos detalles: voces tan mediocres que lo único que hacen es cerrar el paso a jóvenes cantantes que vendrían con ilusión, ganas de aprender y mejorar no tienen sitio en un coso operístico de esta categoría. El irregular Ensemble para roles secundarios herencia de la anterior dirección esperemos que sea corregido por el actual director, el señor Dominique Meyer, para la temporada que viene. Hay mucho cantante joven esperando una oportunidad así que no hay excusas.

 

– Angelotti; el gran bajo Janusz Monarcha que posee una gran voz y va sobrado para este papel secundario. Todo un lujo.

 

-Sacristán; el Kammersänger KS Alfred Sramek que lleva cantando el papel más de 20 años. Es un gran actor y emociona como siempre con su intervención junto al tenor en el aria «Recondita armonia».

 

– Scarpia; el veterano barítono Falk Struckmann (debutó  como Scarpia en Viena en el año 2000) que estuvo brillante en el Te Deum del primer acto y aunque cometió algún pequeño fallo vocal en el segundo acto sigue siendo un gran Scarpia que merece todos nuestros respetos pese a que esa noche no brillo como en otras ocasiones. El generoso público de Viena le aplaudió mucho debido a su gran trayectoria cuando salió a saludar al finalizar el segundo acto.

 

– Floria Tosca; la soprano norteamericana Emily Magee que debutaba en la serie como Tosca (debut el pasado 16 de noviembre) posee una gran técnica y una bonita voz aunque no la termino de ver del todo en este difícil rol. Su voz no es muy grande y aunque estuvo muy segura en los agudos se echo de menos la potencia vocal a la que las grandes intérpretes de Tosca nos tienen acostumbrados. Puccini, un compositor demasiado exigente con las voces femeninas, sigue siendo un barómetro muy valido a la hora de diferenciar a las buenas cantantes de las grandes intérpretes que han marcado una época. Habrá que seguir escuchándola en otros papeles más adecuados a sus cualidades vocales donde seguramente brillara mas. Destaco en la faceta dramática, cumplió en el aria «Vissi d’ arte» y ofreció sus mejores momentos al final del tercer acto.

 

– Mario Cavaradossi; el tenor KS (Kammersänger) Neil Shicoff que pese a la edad ( 62 años y más de 35  de carrera) sigue siendo el mejor Cavaradossi del panorama lírico actual. Me faltan adjetivos para calificar a uno de los mejores tenores que he visto  sobre un escenario, al artífice, junto al gran maestro Alfredo Kraus de que ame la Opera. Shicoff ha sido el mejor Hoffmann, Edgardo, Cavaradossi, Ernani, Lenski, Gustavo III, des Grieux y Hermann de los ultimos años y sin duda alguna el mejor Eleazar de la Historia. Su interpretación del aria “Rachel quand du Seigneur“  es la cosa más impresionante que he escuchado jamás en un teatro.

 

Aunque no es el Shicoff de tiempos pasados interpretó en el primer acto el aria “Recondita armonia“ a un gran nivel (olvidándose de lo que la dirección artística ordena y dirigiendo la voz hacia el público en todo momento como a los apasionados aficionados les gusta) y estuvo muy brillante en los dúos con la soprano. En el segundo acto tenemos que destacar su increíble y siempre intensa „Vittoria, Vittoria“ que para el tiempo ya que dura una eternidad (una de las aportaciones de este gran tenor a la historia del género). Y en el tercer acto el milagro operístico: el tenor americano que estaba cantando bastante bien aunque no con la fuerza y el poder de hace años nos regaló una interpretación de la archiconocida aria “E lucevan le stelle“  para el recuerdo. ¿Cómo se puede cantar e interpretar al joven Cavaradossi de esa manera a su edad? ¿Cómo puede un cantante con 62 años seguir emocionando vocalmente tanto?  Qué gran voz, qué interpretación, qué emoción, qué sentimiento, qué intensidad y qué manera de alargar las notas hasta el infinito… Bordó un tercer acto con un “O dolci mani…“   impresionante que por momentos nos recordaron a las “Toscas“ que hace años nos brindó este grandioso tenor, en nuestra opinión el mejor Mario Cavaradossi de los últimos tiempos.

 

– Director; Philippe Auguin dio una lección de cómo se tiene que dirigir a Puccini. Llevo a la orquesta con maestría y con los tempos adecuados haciendo que sonara con una gran fuerza e intensidad cuando la obra del genio de Lucca lo requería pero eso si, respetando en todo momento la labor de los cantantes.

 

Transmitió en todo momento haciendo que la orquesta, plagada de miembros de la Filarmónica de Viena asiduos a los conciertos de Año Nuevo (como el concertino Rainer Küchl con su inseparable Stradivarius) sonara con una calidad como pocas veces habíamos visto y regaló al público un final apoteósico y emocionante. Bravo señor Auguin: así se dirige a Puccini.

 

Tanto vocalmente como por interpretación y emoción Shicoff (nunca he visto a un tenor una entrega tan intensa llegando incluso al límite en la parte dramática) es un gran artista que siempre deja huella en la memoria de los espectadores. Para siempre quedarán sus actuaciones memorables plagadas de mágicos momentos en los que alargaba las notas hasta lo imposible. Sin duda alguna ha sido el mejor tenor lírico-spinto de la pasada década con roles e interpretaciones que permanecerán para siempre en la memoria de los grandes aficionados. Hablamos de un cantante que siempre ha enamorado y emocionado con sus intensas interpretaciones y con la calidad de su voz.

 

Gracias KS Neil Shicoff por las actuaciones que nos ha regalado en la Opera de Viena durante las últimas 16 temporadas y por esta última gran noche donde elevó el listón a lo más alto en el adiós a la vida.

 

 

 

JOSE NOGUEIRA