Crítica: «Attila» en el Teatro Real

Por María Pardo Crítica: «Attila» Teatro Real 

El Teatro Real presentó esta pasada semana dos representaciones en versión concierto de Attila, de Giuseppe Verdi, con libreto de Temistocle Solera, basado en la obra Attila, König der Hunnen de Zacharias Werner. Estrenada en 1846 en La Fenice de Venecia, esta es una de las óperas menos conocidas de Verdi, aunque no por ello carente de interés ni dramatismo. Crítica: «Attila» Teatro Real 

Ambientada en el siglo V, en pleno declive del Imperio Romano, la ópera gira en torno a la figura legendaria de Atila, el temido rey de los hunos, enfrentado al ideal de civilización romana y al despertar de una nueva Italia. El libreto narra la invasión de Italia por Atila y su enfrentamiento con los romanos. Tras saquear Aquilea, Atila perdona la vida de la noble Odabella, impresionado por su valentía, sin saber que ella está comprometida con Foresto y busca venganza por la muerte de su padre. Atila le propone matrimonio, y Odabella acepta viendo en ello la ocasión perfecta para consumar su venganza. Foresto lidera lo que queda de Aquilea y ordena fundar una nueva ciudad: Venecia. Mientras tanto, el general romano Ezio propone a Atila una alianza para repartirse el imperio, pero este la rechaza. Atila sueña con un anciano que le advierte que no avance hacia Roma. Aun así, cuando decide continuar su conquista, se encuentra con el papa León, quien lo detiene con su sola presencia. La ópera culmina con el asesinato de Atila por mano de Odabella, quien, en nombre de Italia y de su padre, libera a su patria del invasor y se reconcilia con Foresto, que se creía traicionado por ella. La partitura está cargada de contrastes y momentos de intensa carga patriótica. En ella, Verdi traza una fusión entre el drama histórico y el mensaje político, haciendo un uso expresivo del coro y cuidando la construcción de los personajes. Crítica: «Attila» Teatro Real 

Un momento de la función de «Attila» en el Teatro Real / Foto: Javier del Real

La representación del día 14 de mayo, con la orquesta en el foso, los solistas a pie de escenario y un numeroso coro al fondo, estuvo dirigida por el director asociado del Teatro Real, Nicola Luisotti. La ejecución musical del Coro y la Orquesta Titulares del Teatro Real fue impecable y llena de matices expresivos. El coro brilló como auténtico protagonista en los momentos álgidos, con un empaste poderoso y una ejecución vocal trabajada al detalle en las dinámicas, tanto en los pasajes heroicos como en los más íntimos. En cuanto a los solistas, todos de primera línea y con atriles al frente, sus intervenciones resultaron algo desiguales. El bajo-barítono estadounidense Christian Van Horn interpretó correctamente al conquistador Atila, aunque su encarnación del personaje careció de dramatismo. Cumplió con solvencia, destacando especialmente en el fraseo, aunque dio la sensación de que el papel no terminaba de encajar con su presencia escénica. Por su parte, el barítono polaco Artur Ruciński fue un Ezio vibrante, destacando por sus fraseos heroicos, llenos de matices y buena proyección.

Otro nivel ofreció la soprano norteamericana Sondra Radvanovsky. Aunque no estuvo en su mejor forma en cuanto a agilidades y prestancia vocal —fundamentales para un personaje como Odabella—, su amplia experiencia en papeles verdianos le permitió sortear las dificultades de la partitura. Su interpretación dramática la hizo brillar por encima del resto del reparto, arrancando los aplausos entusiastas del público. El tenor lírico estadounidense Michael Fabiano no se quedó atrás. Su intervención fue probablemente la más destacada de las que ha ofrecido en el Teatro Real. Brilló por su calidez vocal y sus cuidados fraseos. El tenor español Moisés Marín, como Uldino, cumplió correctamente, al igual que el bajo surcoreano Insung Sim en el papel del Papa León, cuya breve intervención resultó rotunda.

La programación de esta ópera ha pasado sin demasiada notoriedad, salvo por el hecho de permitir escuchar una obra rara vez representada. No obstante, al tratarse de una versión en concierto, sin dirección escénica, decorado ni vestuario, se resintió en cierta medida el impacto dramático del conjunto, desluciendo parcialmente el esfuerzo de los intérpretes.


Madrid (Teatro Real), 14 de mayo de 2025.  Attila.   Dramma lirico en un prólogo y tres actos. Música de Giuseppe Verdi (1813-1901). Libreto de Temistocle Solera, basado en la obra Attila, König der Hunnen, de Zacharias Werner. En versión de concierto

Estrenada en el Teatro La Fenice de Venecia el 17 de marzo de 1846. Estrenada en el Teatro Real el 15 de noviembre de 1854

Dirección musical: Nicola Luisotti.      Dirección del coro: José Luis Basso

Reparto

Attila: Christian Van Horn.  Ezio: Artur Ruciński. Odabella: Sondra Radvanovsky

Foresto: Michael Fabiano.  Uldino: Moisés Marín.    Leone: Insung Sim

Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real