Por Paulo Silva Crítica: Sabine Devieilhe Degout Real
El Teatro Real ha despedido su ciclo Voces del Real de la presente temporada con una velada singular, titulada Requiem para Ophélie, de vocación luctuosa y refinamiento sonoro, articulada en torno a la figura de Ofelia, la desdichada heroína de Hamlet. Bajo la batuta de Raphaël Pichon, el conjunto Pygmalion presentó un programa tan ambicioso como improbable: las meditaciones de Tristia de Hector Berlioz (1803-1896), escenas seleccionadas de la ópera Hamlet de Ambroise Thomas (1803-1869) y, como epílogo devocional, el Réquiem de Gabriel Fauré (1845-1924). Un itinerario emocional que osciló entre la evocación romántica y el esteticismo crepuscular, sin que terminara de soldarse en una clara unidad artística. Crítica: Sabine Devieilhe Degout Real

El gran reclamo de la noche fue la soprano Sabine Devieilhe, intérprete ideal para la frágil Ophélie: su voz, ligera pero penetrante, deslumbró por la limpieza técnica, la sutileza expresiva y una musicalidad innata. Su escena de la locura fue una filigrana vocal, con trinos, sobreagudos y pianissimi prodigiosos, aunque no siempre logró liberarse de un enfoque algo contenido, demasiado medido para el desgarramiento emocional que pide el personaje. Con todo, su Pie Jesu en el Réquiem selló su actuación con una nota de sublime recogimiento. Junto a ella, el barítono Stéphane Degout ofreció un Hamlet de fraseo noble y buena línea, aunque cierta falta de presencia vocal limitaron su impacto en los momentos de mayor dramatismo. Más eficaz en la introspección que en la vehemencia, su intervención resultó elegante pero algo desvaída.

Junto a ella, el barítono Stéphane Degout ofreció un Hamlet de fraseo noble y buena línea, aunque las carencias tímbricas en el agudo y cierta falta de presencia vocal limitaron su impacto en los momentos de mayor dramatismo. Más eficaz en la introspección que en la vehemencia, su intervención resultó elegante pero algo desvaída.
Pichon dirigió con claridad y sentido del detalle, aunque su tendencia a aplicar la misma pátina de refinamiento a todo el repertorio terminó diluyendo contrastes esenciales. Lo que en Fauré resultó apropiado, en Thomas se tornó excesivamente lánguido. La orquesta sonó mate, privada de brillo, y el coro, afectado por una acústica desfavorable, no alcanzó la pureza tímbrica que esta música requiere. Crítica: Sabine Devieilhe Degout Real

Fue, en suma, una noche de hallazgos y desequilibrios: un homenaje estético a Ofelia más que una exploración profunda de su tragedia. Entre el preciosismo sonoro y la distancia emocional, quedó la impresión de un ritual bello, sí, pero más soñado que vivido.
Madrid (Teatro Real), 13 de mayo de 2025. Réquiem por Ophélie. Concierto elaborado con extractos de la ópera Hamlet (Ambroise Thomas), Tristia Op. 18 (Hector Berlioz) y el Réquiem (1888) de Gabriel Fauré íntegro.
Sabine Devieilhe, soprano; Stéphane Degout, barítono. Pygmalion, coro y orquesta. Dirección musical: Rapháel Pichon. OW