n Por Carlos J. López Rayward
¨Rodelinda¨ en el Carnegie Hall
El conjunto barroco The English Concert y su director Harry Bicket regresan al Carnegie Hall de Nuev York con ¨Rodelinda, regina de´ Longobardi¨, tras su aparición el marzo pasado en el mismo escenario con ¨Solomon¨, ambas óperas de Handel representadas en versión concierto. ¨Rodelinda¨ en el Carnegie Hall.
En Nueva York hay siempre gente para todo, pero Handel en particular cuenta con un nutrido grupo de melómanos incondicionales que llenan el Carnegie Hall cada vez que Bicket y su orquesta recalan en la ciudad. Son un público entendido y refinado, y en ese aspecto algo alejado de la ecléctica clientela de la Metropolitan Opera. Por ello, The English Concert afronta cada actuación en Nueva York como una prueba que le exige el máximo nivel. Y esta orquesta no suele decepcionar.
El título es un atractivo en sí mismo. ¨Rodelinda, regina de´ Longobardi¨ es una de las óperas más reprentadas de Handel. Y quizá la más entretenida, ya que combina elementos de acción y drama, servidos en medio de la más bella orquestación barroca.
También nos resulta hoy innegablemente actual. Rodelinda es la primera ópera de Händel en la que el personaje principal es una mujer, la heroína en la que se concentran las mejores virtudes humanas, mientras que los personajes masculinos aparecen como villanos, con personalidades volubles e inestables, lo que supone una revolución en el paradigma de la psicología de género en el teatro del siglo XVIII. Algo poco menos que milagroso para la época. Es por todo ello que, incluso en versión concierto, ¨Rodelinda¨ nunca decepciona. ¨Rodelinda¨ en el Carnegie Hall
Desde un enorme conociento de la obra y el estilo, Harry Bicket dirigió a The English Concert de manera intuitiva y natural, y supo mantener el interés y la atención del entendido público. Bicket sabe bucear en la partitura para desenterrar sus mejores acentos, pero sobretodo convence al dirigir mirando al corazón de los personajes. Bicket estaba al frente de algunos de los mejores solistas del repertorio, de los que pasamos a comentar su desempeño. ¨Rodelinda¨ en el Carnegie Hall.
La soprano inglesa Lucy Crowe interpretó con éxito el papel titular. Su Rodelinda resulta creíble como verdadera líder y soberana de la ópera, siempre un paso por delante de todos los hombres. La Crowe cuenta con un bello timbre y variedad cromática dentro de una paleta más bien mate. Canta con espléndida técnica, basada en un sólido apoyo, que le permite salir al paso de la estrechez del sonido en la zona grave, y la falta de brillo en los agudos. Las agilidades le suenan impecables, sin esfuerzo, muy poéticas, con fantásticos trinos y lucidas fermatas. La voz de Lucy Crowe tiene esa calidad sonora casi instrumental que se mezcla con los músicos de The English Concert en feliz armonía.
En el papel del rey Bertarido encontramos al contratenor Iestyn Davies, uno de los mejores de su cuerda, y absoluto especialista en papeles handelianos. Davies fue el solista más celebrado por el Carnegie Hall, que apreció la perfección en su afinación y su línea vocal variada y elocuente. El lujo del canto de Davies no está reñido con el estilo, que abraza con estudiada musicalidad.
Davies viste el texto con el canto, sin sofocarlo ni forzar la elocución. El cantante británico canta con la mayor intención lírica y en perfecta compenetración con The English Concert, del que es asiduo colaborador. Los grandes cantantes handelianos se descubren en los recitativos. Y ese apartado Iestyn Davies y Harry Bicket forman un tándem difícilmente superable.
La mezzosoprano inglesa Christine Rice fue una interesantísima Eduige. Rice supo mostrar todas las caras de la hermana del rey Bertarido, asi como su evolución a lo largo de la ópera. La cantante se mostró segurísima en las agilidades pese a la pastosidad considerable de su instrumento. A la voz le falta algo de sustancia en el centro, pero la artista la maneja con maestría de orfebre.
Muy pegada al continuo de Bicket, Christine Rice cantó con gran personalidad, continuos guiños de complicidad al público, y dejó la agrable sensación de los artistas que cantan con generosidad y honesta madurez.
El contratenor americano Aryeh Nussbaum Cohen cantó el papel de Unulfo, un personaje a la sombra de Bertarido, pero clave para el desarrollo de la trama y con algunas páginas de lucimiento para el solista. Cohen desarrolló un canto enérgico y entregado en las escenas de bravura, entonando con fiereza y sin miedo. Esa intensidad tuvo su contrapunto en una media voz dulce y delicada.
En 2018, Nussbaum Cohen ganó el premio Richard Tucker, que se otorga al cantante de ópera estadounidense más prometedor. El artista sigue una trayectoria ascendente, apoyado en un instrumento privilegiado, bien timbrado en todo el registro, con un sonido homogéneo y de enorme calidad.
Eric Ferring se enfrentó al complicado papel de Grimoaldo, un rol que requiere el máximo de los tenores, tanto en lo vocal como en lo actoral. Ferring superó con nota todas las pruebas, desplegando un canto interesante, con una línea bien ligada y una media voz superior a la mayoría de los sus compañeros de cuerda. El artista tiene un acceso fácil al agudo, con un sonido igual en todo el registro, algo atiplado, aunque coloreado siempre con intención dramática.
Por su parte, el joven bajo-barítono americano Brandon Cedel apareció en papel del intrigante Garibaldo. Cedel atesora un timbre muy agradable, con un centro cremoso y oscuro, muy amable al oído. Al lado de sus compañeros, su Garibaldo resultó alto escaso de gusto y estilo, pero convenció con inflamados recitativos a plena voz, transmitiendo la maldad del personaje.
Los maestros de The English Concert disfrutaron con el encargo, y se mostraron seguros y motivados en una partitura que conocen al dedillo. Destacamos las sobresalientes intervenciones de la flautista Rosemary Bowker, una vistuosa del barroco, y al inspiradísimo Sergio Bucheli en la tiorba, en plena conjunción con el continuo de Harry Bicket.
Con estos mimbres, no es de extrañar que esta Rodelinda haya sido uno de los eventos operísticos más relevantes de estos días en Nueva York. Esperamos que este enorme éxito sirva para que cada vez se programe más ópera en el Carnegie Hall.
Carnegie Hall de Nueva York, a 10 de diciembre de 2023. Rodelinda, regina de’ Longobardi, ópera en tres actos de Georg Friedrich Händel, con libreto de Giacomo Rossi.
The English Concert. Director: Harry Bicket. Solistas: Lucy Crowe, Christine Rice, Iestin Davies, Aryeh Nussbaum Cohen, Eric Ferring, Brandon Cedel. n Hallenberg en Solomon
