Crítica: velada musical Fanny OCNE Por Federico Figueroa
Una celebración muy merecida
No podría haber encontrado mejor manera de celebrar el cumpleaños de Fanny Mendelssohn que acudiendo a la cita que tuvo lugar el día de su efeméride, 14 de noviembre, en el ámbito del Ciclo Satélites No. 5 de la OCNE. Crítica: velada musical Fanny OCNE
La idea de representar una de las veladas musicales que Fanny Mendelssohn, como anfitriona y/o intérprete, organizaba en el «salón» de su casa familiar, narrándonos detalles de aquellos Sonntagsmusiken (Domingos musicales), propició que el público asistente nos introdujéramos en ese ambiente que ella era capaz de crear. Y así nos hicieron sentir como en casa, escuchando el repertorio exquisito recogido por el grupo de reciente creación denominado «El Romance de Galatea», ejecutado de forma impecable y armoniosamente por cuenta de las voces más destacadas del Coro Nacional de España y es que , «hay cantera». La propuesta fue liderada por la excelente violonchelista y directora Beatriz González, artífice del espectáculo también como creadora y narradora de unos textos que acercan al público general al corazón de la música.
Algunos de los momentos especialmente aplaudidos fueron los dúos de Robert Schumann (Op. 78) y Felix Mendelssohn( Op. 63) interpretados de manera magistral por el tenor Ariel Hernández, la soprano Francesca Calero y el barítono Víctor Cruz. El corazón del concierto nos situó en el Salmo 19 de Felix Mendelssohn, pieza que interpretaron los cantantes a capella con aplomo y afinación excelente y que dejó una grata sensación en el público.
El trío femenino «Les trois belles demoiselles» de Pauline Viardot, interpretado con soltura escénica por la mezzosoprano Beatriz Oleaga, y las sopranos Paloma Friedhoff y Francesca Calero, puso la nota de comedia del concierto en contraste con el gran lirismo que demostraron los tres instrumentistas del elenco en la interpretación del Trío de Clara Schumann (Op. 17. 3º movimiento), donde las líneas de las violinista Alejandra Navarro ( solista de la OCNE) y la invitada y alma mater del proyecto, Beatriz González, se sucedían como si de una misma voz se tratase. Jesús Campo, pianista titular del Coro Nacional de España, director de orquesta y uno de los mejores especialistas en lied de nuestro país, a su temprana edad demostró ser un eje fundamental de gran parte del repertorio, mostrando en todo momento una escucha activa y cómplice con el resto de intérpretes. Cerraba el grupo con un arreglo de la directora, sobre la «Cantata Lobkowitz» de L. van Beethoven, que puso en el terreno de juego al tutti, para finalizar un concierto. El bis corrió a cuenta de otra compositora, Amy Beach, contemporánea de Johannes Brahms, que en su coral «Nunc Dimitis», que fue el verdadero broche estelar a una noche para tener en el recuerdo.
Y es que fueron muchos los ingredientes que hicieron de esta velada un plato «gourmet»: programa variado, la música como eje central, emoción interpretativa, originalidad en la propuesta, cuidados movimientos escénicos y justa reivindicación. Y es que no podemos olvidar el objeto de esta velada, recordar a una de las más célebres artistas que quedó a la sombra por una sociedad en la que no tenía oportunidad de brillar, y que gracias a su labor filantrópica encontró su lugar de expansión artística en el número 3 de Leipzigerstrasse de la capital prusiana.
La directora dirigió al público unas palabras sobre la motivación de este espectáculo que disertaba sobre la obligación de hacer vivir su obra y difundirla, la de ella y todas aquellas compositoras que en su brillantez, fueron apagadas por las condiciones sociales de la época. Para finalizar me van a permitir una última reflexión más sobre lo acontecido anoche…Ante la ausencia de miembros de la Dirección de la OCNE en la sala, me pregunto si se pone en valor este tipo de conciertos. Me pregunto por qué la marca OCNE no puede tomar una mayor difusión en España, que es mas que Madrid y una pocas grandes ciudades, y prestar el servicio público al que se debe, participando en festivales de toda España, para que proyectos como éste puedan ser apreciados por más público. ¿No creen que sería positivo descentralizar esta labor que desempeñan magistralmente los profesores de la OCNE y hacer de este proyecto algo más ambicioso?….tomen nota, por la música, por la cultura pública y el acceso a la misma de todos los ciudadanos. Crítica: velada musical Fanny OCNE
14 de noviembre, Madrid (Auditorio Nacional) Una noche musical en Berlín. Obras de: J. S. Bach, P. Viardot, C.Schumann, L. van Beethoven, Felix y Fanny Mendelssohn.