Torralba de Calatrava, capital veraniega de la zarzuela

                                                   Torralba zarzuela Por Valentina Guarín

El arte tiene la capacidad de transportarnos a diferentes épocas, reflejar la idiosincrasia y trascender para identificar a individuos y colectividades. Y esta es la magia de la zarzuela. Del 5 al 9 de julio, e incluso desde semanas anteriores, los participantes en el II Estudio de Zarzuela de Torralba de Calatrava, proyecto dirigido a preservar y difundir el género lírico español por excelencia, empezaron a entrelazar los hilos de uno de los títulos más queridos del repertorio, La del manojo de rosas, del maestro Sorozábal, que pudimos ver representado íntegramente la noche del sábado en el singular marco del Patio de Comedias de la localidad ciudadrealense. El Estudio de Zarzuela es fruto del afán del director musical Francisco-Antonio Moya y del director de escena Federico Figueroa, quienes junto a Lorenzo Moya (pianista repetidor), a la Orquesta Filarmónica de La Mancha y a la Coral Polifónica Santísima Trinidad de Torralba, ya emplazaron a un público feliz y entregado a una segunda edición de esta magnífica iniciativa.

No se puede dejar de mencionar a los que le dieron vida a los personajes de la zarzuela, los verdaderos protagonistas, seleccionados entre un creciente número de candidatos que quieren vivir una experiencia tan intensa y enriquecedora como esta.

De izquierda a derecha: Julio Cancio, Ana Puche y Carmen Gavilán
De izquierda a derecha: Julio Cancio, Ana Puche y Carmen Gavilán

Se trata de las sopranos Ana Puche (Ascensión) y Carmen Gavilán (Clarita),  el barítono Juan Sousa (Joaquín), los tenores Julio Cancio (Ricardo) y Ángel Baile (Capó) y los actores-cantantes Álvaro Siddaharta (Espasa), Carmen Fernández (Doña Mariana), Kelly Oliveros (una inglesa), Pilar García-Soto (la Fisga), José María Naranjo (primer parroquiano ), Enrique Espinosa (segundo parroquiano/camarero) y Aura Sebe (doncella). Todos ellos hicieron las delicias del respetable con sus dotes artísticas y su buen hacer sobre el escenario.

“El objetivo del Estudio de Zarzuela es preparar escénica y musicalmente una obra del género lírico español, sumergiendo a los artistas en la realidad de un montaje profesional” –señala  Figueroa–, añadiendo, “es un proyecto con una alta carga de trabajo colaborativo, en el que todos los participantes se involucran en diferentes aspectos de la producción, lo que les proporciona una visión cabal de lo que sucede antes, durante y después del espectáculo. El hecho de que se monte un título completo con orquesta representa una experiencia única en el actual panorama de los estudios y talleres de ópera y zarzuela en España. En esta edición, además, hemos contado con la inestimable presencia de la veterana soprano Guadalupe Sánchez, que ofreció una interesantísima charla sobre la obra, los personajes y su experiencia profesional, y con el joven director de escena Emilio López, que ya ha mostrado su talento en excelentes propuestas operísticas y de zarzuela en escenarios de España”. Torralba estudio de zarzuela

De izquierda a derecha: Álvaro Siddharta, Julio Cancio, Juan Sousa y Ángel Baile

El 9 de julio, la representación de La del manojo de rosas me hizo rememorar (mi madre es una cantante lírica) aquellos días de mi niñez, en los que corría de aquí a allá por un teatro, tarareando canciones de zarzuela y sintiendo esa ola de nervios que todos tenían minutos antes de entrar a escena. Me sentí como los artistas que están a punto de presentarse; esa emoción de hacer lo que tanto amas y ver al público amando también lo que haces. Pensaba en los jóvenes del coro emocionados por estar allí, buscando de reojo caras conocidas entre los que han ido a verlos. Me vi reflejada en los artistas recordando sus líneas, entradas al escenario y algún detalle específico. Y sobre todo constaté en el público que llenaba el patio su regocijo de escuchar esas voces nuevas, sus risas bulliciosas y el calor del bueno, el humano.

De izquierda a derecha: José María Naranjo, Enrique Espinosa y Álvaro Siddaharta
De izquierda a derecha: José María Naranjo, Enrique Espinosa y Álvaro Siddaharta

Para mí, su servidora (no española), fue un gusto ver Zarzuela representada por españoles. He de reconocer que es un género capaz de adaptarse a cualquier cultura, porque trata temas que a todos nos conciernen, temas que nos duelen, nos enojan, nos movilizan y emocionan. ¿Qué se podría hacer para que cada vez más personas disfruten y se apropien de este género? Es necesario, así como con cualquier otro producto cultural, poner en valor sus virtudes, enamorar a los clientes y generarles una necesidad para que ellos quieran cada vez más zarzuela.  Es necesario que las personas se sientan como aquella niñita que disfrutaba días enteros metida en el teatro acompañando a su mamá. Y esto es lo que hace el Estudio de Zarzuela de Torralba de Calatrava, mantener viva la esencia humana de la zarzuela, darnos nuevas oportunidades de reconocernos en ella, de desarrollarnos a través de sus historias. Torralba estudio de zarzuela


9 de julio de 2022, Patio de Comedias (Torralba de Calatrava). II Estudio de Zarzuela / «La del manojo de rosas»

Federico Figueroa, director de escena. Francisco-Antonio Moya, director musical. Orquesta Filarmónica de La Mancha. Lorenzo Moya, pianista repetidor. Carmen Fernández, directora de la Coral Santísima Trinidad. Julián Bermejo, sonido e iluminación.

Ana Puche (Ascensión), Juan Sousa (Joaquín), Julio Cancio (Ricardo), Carmen Gavilán (Clarita), Ángel Baile (Capó), Álvaro Siddartha (Espasa), Carmen Fernández (Doña Mariana), Federico Figueroa (Don Daniel/Don Pedro), José María Naranjo (Primer parroquiano), Enrique Espinosa (Segundo parroquiano/Camarero), Pilar García-Soto (La Fisga), Kelly Oliveros (Una inglesa), Aura Sebe (Doncella)