Dentro de su temporada 2014, la Casa de la Ópera de Buenos Aires que dirige la célebre soprano argentina Adelaida Negri, presentó esta deliciosa Gala de Ópera con dos estupendas cantantes en quienes tenemos puestas nuestras más vivas esperanzas, atentos al talento demostrado y los resultados alcanzados durante esta velada.
Laura Pisani es una soprano de sugestiva voz, con un dominio asombroso de las coloraturas más exigentes, conservando una cuidada expresividad y un volumen de esos que se imponen en la sala. María Luisa Merino Ronda es una mezzo de un centro de bello color, agudos seguros y graves interesantes que conjuga un cuidado fraseo con una buena línea y una dramaticidad conmovedora. A ambas, que ya están desarrollando promisorias carreras en el país y el extranjero, hemos tenido el gusto de aplaudirlas en la temporada pasada en el Teatro Avenida en sus encarnaciones de la Reina de la Noche en la Flauta Mágica mozartiana que presentó Juventus Lyrica; y en la Fenena del Nabucco verdiano producido por Buenos Aires Lírica, respectivamente.
En esta velada, la íntima sala de la Casa de la Ópera fue el escenario de un recital tan variado como exigente en el que las dos intérpretes cautivaron al auditorio,
Desde el Dúo de lapresentación de la rosa de Dre Rosenkavalier, de Richard Strauss, cantado con una línea exquisita, un inteligente juego de matices y voces que se acoplan a la perfección; pasando por una segura versión del «Parto, parto…» de La Clemenza di Tito, de Mozart, en la que María Luisa Merino Ronda supo mostrar su ductilidad a la hora de volver expresiva una frase, pintando cada una de ellas con el color justo desde el heroísmo y el furor al enamoramiento; y hasta llegar a la terrible aria de Constanze de El rapto en el Serrallo, de Mozart, con la que Laura Pisani mostró que la coloratura dramática se adapta a la perfección a sus dotes y temperamento, interpretando con una intención y una calidad musical poco frecuentes.
El programa siguió con una conmovedora «escena de las cartas» de Werther, de Massenet, un repertorio en el que la voz de María Luisa Merino Ronda también podría lograr grandes cosas dado el balance equilibrado de su timbre tan necesario para la ópera francesa; luego sumó Laura Pisani el aria «Je cede a sa voix» de Medée de Cherubini, interpretada en estilo y con seguridad; y Merino Ronda nos entregó una grata versión del aria «O mio Fernando» de La Favorita de Donizetti cantada con expresiva lectura, sin desbordes y con una voz que corre franca a lo largo del registro,
El aria «regnaba nel silenzio» de Lucia di Lammermoor dio nueva oportunidad de lucirse a Laura Pisani y el dúo «Mira o Norma» de la célebre ópera de Bellini cerró una velada que guardaremos en el recuerdo por mucho tiempo.
Desde el piano resultó siempre cumplida y eficaz la labor del Mtro. Lionel Fischer, quien se destacó particularmente en la difícil versión pianística del dúo de Der Rosenkavalier plasmada con elegante transparencia.
La calidez de la anfitriona, la calidad de los artistas y el común amor por la lírica nos devolvieron a la noche porteña felices de haber disfrutado de tanto bueno,
Gala de Ópera
Laura Pisani, soprano
Ma. Luisa Merino Ronda, mezzosoprano
Lionel Fischer, piano
Casa de la Ópera de Buenos Aires, 12 de Mayo de 2014
Prof. Christian Lauria
