Hay en Madrid una cita imprescindible para los amantes del canto, el extraordinario ciclo de Lied del Teatro de la Zarzuela, que lleva ya que diecinueve temporadas con nosotros y esperemos que se quede, cuando menos, otras tantas. Éste es el tesoro musical escondido de la capital por el que han pasado sin mucho revuelo los mejores cantantes en activo, y donde además hemos podido ver tantas veces a las incipientes promesas líricas que poco tiempo después han se han hecho célebres para el gran público. Tras el gran susto que supuso para los aficionados el abandono de patrocinio y financiación por parte de Caja Madrid y el alivio que produjo el relevo del Centro Nacional de Difusión Musical, de momento y a pesar de los recortes, el Ciclo parece fuera de peligro.
Esta semana nos visita -haciendo doblete con su Anfortas en el “Parsifal” que se representa a la vez en el Real- un viejo y querido conocido, Matthias Goerne. Referencia absoluta en los Lieder de Schubert, Goerne nos trae en esta ocasión un programa de canciones de Schumann y Mahler; dos autores de importancia capital a los que se les debe agradecer la consolidación del este género y su contribución a que ganara el respeto que hoy se le reconoce. Sólo por esto se justificaría la elección pero es que además, y sobre todo, ambos autores han compuesto algunas de las más bellas páginas de la historia del Lied, que por fortuna se han seleccionado para la noche del martes.
Si tienen la oportunidad, no se lo pierdan. Como mínimo, será interesante analizar las similitudes y los contrastes de las obras de uno y otro compositor, pero sobre todo es que estás piezas en las sabias manos de Goerne son siempre una lección de canto puro, emoción y sensibilidad.