- La ópera de Rufus Wainwright, integrada en el Universal Music Festival, cierra la temporada 2021/22 del Teatro Real.
- Thomas Hampson, Alexandra Urquiola, Santiago Ballerini, Christian Federici y Vanessa Goikoetxea encabezan el reparto.
- Ainhoa Arteta, Xabier Anduaga y Rubén Amoretti, previstos originariamente, cancelan por enfermedad.
- La producción también podrá verse el viernes 29 de julio en el Festival Castell de Peralada.
El próximo 27 de julio, el Teatro Real culminará la actual temporada con el estreno en versión semiescenificada de Hadrian, segunda incursión en la ópera del cantautor canadiense-estadounidense Rufus Wainwright. La protagonizará el barítono Thomas Hampson, quien dio vida al emperador Adriano en el estreno absoluto de la obra en Toronto en 2018.
Haciendo uso de una paleta musical que el propio autor define como «más oscura y potente» que la de su primera ópera –Prima donna–, tejida con largas líneas melódicas mezcladas con ricas texturas orquestales, Wainwright construye un relato verdaderamente apasionante en torno a la vida del gran emperador romano.
Thomas Hampson, en el rol titular, y Vanessa Goikoetxea (Sabina) estarán acompañados por tres incorporaciones de última hora debido a las ausencias por enfermedad de los cantante previstos inicialmente. La soprano Ainhoa Arteta (Plotina) será sustituida por la joven neoyorquina de origen cubano Alexandra Urquiola; el tenor Xabier Anduaga (Antinous) será reemplazado por Santiago Ballerini; y el papel de Turbo será defendido por el barítono Christian Federici, en sustitución de Rubén Amoretti. Junto a ellos estarán el Coro y la Orquesta Titulares del Teatro Real, bajo la dirección musical de Scott Dunn. Hadrian Teatro Real
Las impactantes imágenes del fotógrafo Robert Mapplethorpe y la dirección actoral de Jorn Weisbrodt pondrán escena al espectáculo, cuya gestación Rufus Wainwright explica así: “Cuando leí por primera vez las fabulosas Memorias de Adriano, de Marguerite Yourcenar, una novela que inspiró al menos a tres generaciones de hombres homosexuales, me asaltó al instante la idea de transformar este tema histórico en forma de ópera. Tanto su naturaleza íntima como su salvaje grandeza parecían perfectamente adecuadas para lo que la ópera hace mejor: crear una hiperilustración de las oscuras vidas interiores de las personas que se enfrentan a formidables circunstancias exteriores y, al mismo tiempo, recorrer musicalmente las dimensiones surrealistas de lo que hay entre ellas. En mi opinión, ninguna otra forma teatral retrata verdaderamente la vida en una miríada de colores vibrantes y brillantes como lo hace la ópera, y la historia del emperador romano Adriano es un diamante perfectamente tallado para esa tarea”.
La ópera se centra en el verdadero pero problemático amor del emperador por el bello joven Antinoo. Mientras el oscuro espectro del monoteísmo se acerca anunciado por los judíos y los primeros cristianos, hasta destruir el antiguo sistema de creencias paganas. La investigación histórica asegura que muchas partes de la vida y el legado de Adriano fueron destruidos por sus detractores y, aunque fue un gobernante productivo y justo, su masacre de los judíos no puede ser olvidada, y es un punto principal de la obra.
Así, Rufus Wainwright concluye: “Casi inmediatamente después de la muerte de Adriano, los dictados patriarcales de la humanidad se apoderaron de la narración, dejando que la patética observación antigua de que «lloró como una mujer» -ante el ahogamiento de Antinoo-, ensombreciera todos sus logros”. Hadrian Teatro Real
Redacción OW Hadrian Teatro Real