Si hace unos días alabábamos, no sin reservas, la producción de King Priam de la English Touring Opera (pueden ver aquí la crítica), hoy tenemos que felicitar muy mucho a esta compañía por su segunda producción en esta temporada, estrenada esta misma semana en el Linbury Studio Theatre.
Podemos resumir en dos palabras: ¡definitivamente magnífico! Por supuesto que la obra en sí misma es un bombón: más de veinte personajes van sucediéndose a la vez que nos narran las peripecias de Paul Bunyan, el legendario leñador gigante creado como reclamo publicitario en 1916 por la Red River Lumber Company. Britten toma este fabuloso batiburrillo de comicidad, ironía y poesía creado por Auden y compone una obra que se atiene al género, sin grandes pretensiones pero de muy notables resultados: folk, comedia musical americana, himnos o blues, pero con un tratamiento orquestal que sólo un genio como Britten es capaz de manejar en una obra de estas características.
Especialmente reseñable es el trabajo de Liam Steel, que ha sido capaz de ofrecer un espectáculo de gran calidad a pesar de las limitaciones propias del espacio y del presupuesto. Saca de cada cantante un personaje (o varios, pues algunos tienen que doblar roles) perfectamente caracterizado y consigue que mantener un ritmo vibrante a la par que equilibrado propio del teatro musical. Muy inteligente la propuesta escenográfica de Anna Fleischle, quien también aquí como en King Priam tuvo que ceder el fondo del escenario para situar allí a la orquesta, y excepcional el trabajo de iluminación de Guy Hoare, cuyo repertorio de efectos parecía no tener fin, a pesar de que los medios con que contase fueran muy pocos. En el intermedio, me acerqué al escenario y puedo asegurarles que pocas veces he visto espectáculos tan bien iluminados con tan pocos focos y tan limitados. Nada de cabezas móviles, focos con cambio de color o cañones: luz de PAR, PC y panoramas pequeños, que son los focos más sencillos del mercado, pero todo ello aprovechado al máximo.
No sé hasta qué punto pueda ser justo resaltar a alguno de los cantantes, no sólo porque la obra tenga cierto carácter coral, sino porque absolutamente todos ofrecieron lo mejor de sí mismos, ya fueran más o menos principales sus roles. Si bien es cierto que ninguno de los papeles presenta grandes dificultades canoras, también es verdad que debe de resultar fácil montar musicalmente esta opereta, pues a pesar de que la obra sea totalmente tonal, constantemente hay cambios de tonalidad y nos encontramos en muchas ocasiones con intervalos poco predecibles o intuitivos en las entradas de los cantantes. Por lo que también debemos felicitar a Philip Sunderland, director musical del espectáculo.
“America can break your heart”, se canta en una de las escenas. Vosotros, chicos de la English Touring Opera, nos habéis conquistado el corazón.
Paul Bunyan
Opereta en dos actos y prólogo Op. 17
Música de Benjamin Britten
Libreto de W. H. Auden
Director de orquesta: Philip Sunderland
Director de escena: Liam Steel
Diseño de iluminación y vestuario: Anna Fleischle
Diseño de luces: Guy Hoare
Ayudante de dirección: Dafydd Hall Williams
Paul Bunyan (voz): Damian Lewis
John Inkslinger/baladista: Mark Wilde
Hel Helson: Wyn Pencarreg
Tiny: Caryl Hughes
Hot Biscuit Slim: Ashley Catling
Sam Sharkey/Andy Anderson: Stuart Haycock
Ben Benny: Piotr Lempa
Fido: Abigail Kelly
Moppet: Amy J. Payne
Poppet/Moon: Emma Watkinson
Chico de la Western Union: Matt R. J. Ward
John Shears / Cantante de blues: Adam Tunnicliffer
Cross Crosshaulson/ granjero: Matthew Sprange
Cantante de blues/crony: Johnny Herford
Jen Jenson/crony: Maciek O’Shea
Pete Peterson: Simon Gfeller
Cantante de blues/crony: Henry Manning
Ganso / Viento: Hannah Sawle
Ganso: Lorna Bridge
Ganso / Garza: Annabel Mountford
Cantante de blues / ardilla: Helen Johnson
Escarabajo: Susan Moore
Joven árbol / Chico: Emily-Jane Thomas
Orquesta de la ETO
Raúl Asenjo