Hace unos días Roberto Alagna, en una entrevista a la revista italiana Connessi all’Opera, titulada “No quiero ser rehén del mal gusto”, daba por fin su versión de lo que había sucedido con la anunciada producción de Tosca de la nueva temporada del Liceu para que él y su pareja artística y sentimental, Aleksandra Kurzak, abandonaran repentinamente el proyecto. El tenor, que había sido fichado como Cavaradossi, aseguró que ambos habían firmado contratos para la antigua producción del Liceu y que se enteraron del cambio durante el anuncio de la temporada. Roberto Alagna De Caluwe
Fue entonces cuando una amiga les proporcionó un vídeo de la puesta en escena de Rafael R. Villalobos, tras cuyo visionado tomaron la decisión de comunicar al teatro que no participarían en ese montaje. “Aleksandra y yo no queremos ser rehenes de (···) una incoherencia total respecto a la Tosca de Puccini. No tiene sentido hacer de Pasolini el personaje principal de esta historia. No tiene nada que ver con la libertad de expresión” –respondía, entre otras cosas, al ser preguntado sobre qué le molestaba de la versión de Villalobos. Además, añadió que nunca fue capaz de ver hasta el final Salò o le 120 giornate di Sodoma, película en la que inspira el trabajo del sevillano, y que incluso llegó a tirar el videocassette de la misma a la basura.
Dicho esto, el cantante tuvo unas palabras de agradecimiento hacia los responsables del coliseo barcelonés: “Para ellos, nuestra presencia en el Liceu era el punto fuerte de la temporada e incluso nos propusieron retomar la producción anterior”, cosa que rechazaron porque entienden que el “regista” también tiene derecho a trabajar y porque no querían crear más problemas y enemistades. Roberto Alagna De Caluwe
Esta entrevista no pasó desapercibida para el intendente de La Monnaie, Peter De Caluwe, impulsor de la producción de la discordia, quien vio una nueva oportunidad para poner los puntos sobre las íes. En un nuevo comunicado, se permite ironizar sobre la actitud de Alagna de priorizar la belleza de la música de Puccini sobre la gravedad de los temas que toca el libreto y critica que el tenor se autoproclame abanderado del buen gusto mientras da vida a Al Capone en otra producción: “La vida de un gángster y capo de la mafia parece plantearle menos problemas morales, y estar rodeado de alguna desnudez femenina en el Paris Folies Bergères sin duda le da una perspectiva más alegre que tolerar que la Sra. Alagna-Kurzak interprete el ‘Vissi d’arte’ al lado de un macho prerrafaelita desnudo”. Roberto Alagna De Caluwe
Por si fuera poco, De Caluwe aporta una nueva perspectiva respecto a la salida de Alagna-Kursak de Tosca. En un tono directo y agrio, se pregunta si el tenor “podría haber compaginado una nueva producción en Barcelona que se superpone exactamente con los ensayos finales de París y las fechas de estreno (de Al Capone)”. Y añade: “el proyecto de París fue publicado el 4 de abril, justo cuando Alagna inició el proceso de cancelación de Barcelona, poniendo en riesgo toda la coproducción”. Y el belga concluye con estas palabras, no sin antes señalar el hecho de que Alagna ha firmado nada más y nada menos que noventa funciones de Al Capone: “En nuestro negocio, siempre es sabio mantenerse honesto y no verter ‘merda’ (lo siento, repito las palabras de Alagna cuando se refiere a un artista superlativo como Pasolini) sobre equipos y casas que tratan de reflexionar creativamente sobre cómo interpretar la ópera hoy en día”.
Jean-Felix Lalanne, compositor de Al Capone, ha reaccionado a este comunicado acusando a De Caluwe de que sus palabras están al límite de la difamación, añadiendo que lleva trabajando con el tenor francés desde 2020, quien siempre lo ha mantenido informado de su agenda profesional para que pudieran organizar las fechas del espectáculo. Por alusiones, la que falta por pronunciarse es Aleksandra Kurzak, quien debería al menos dar su opinión acerca de las pinturas prerrafaelitas. Y quién sabe si dentro de poco veremos una ópera basada en esta nueva batalla entre los custodios de la tradición y los paladines de la innovación operística. Desde luego, no faltaría argumento.
Redacción OW Roberto Alagna De Caluwe