Teatro Lírico Andaluz recupera la zarzuela ‘¡Adiós Málaga la bella!’
Teatro Lírico Andaluz recupera la célebre zarzuela ‘¡Adiós Málaga la Bella!’. Incluida en la VIII Temporada Lírica Malagueña que desarrolla el TLA en el Cervantes a partir del próximo septiembre, se presenta hoy en un acto en el Colegio de Graduados Sociales (calle Compañía, 20 horas). La zarzuela cuenta con Lourdes Martín (Milagros), Miguel Guardiola (tío Borrasca), Pablo Prados (Andrés), Guillermo García (el Manchao) y Luis Pacetti (el señor Frasquito) en los principales papeles. Pablo Prados es responsable de la dirección artística y Arturo Díez Boscovich de la musical. Cuenta también con la participación del coro y orquesta de Teatro Lírico Andaluz.
‘¡Adiós Málaga la bella!’ es una zarzuela cómico-dramática de costumbres malagueñas, en un acto y tres cuadros, en prosa. El primer y tercer cuadro se desarrollan en un trozo de playa malagueña y el segundo en la choza del tío Borrasca. Fue compuesta por José Cabas Quiles (1879-1942), con libreto de Antonio Saenz y Saenz (1874-1962). Narra el amor de dos hermanos, Andrés y El Manchado, hacia la misma mujer, Milagros, hija del tío Borrasca. Uno de ellos, al abandonar la ciudad para dejar libre el camino a su hermano, exclama la famosa frase: «¡Adiós, Málaga la bella! ¡Tierra donde yo nasí! ¡Para todos fuiste madre, y madrastra para mí! ¡Adiós, Málaga la bella!».
Cabas Quiles fue un notable compositor malagueño que además de obras propias muy meritorias realizó colaboraciones con grandes compositores españoles como el maestro Francisco Alonso, traduciéndose en obras extraordinarias del repertorio lírico español.
La obra se estrenó en el desaparecido Teatro Vital Aza de Málaga, la noche del 24 de agosto de 1908. En esos años fue interpretada también en más de un centenar de ocasiones en el Teatro Cervantes de Málaga según el anuario del propio teatro.
Teatro Lírico Andaluz es la primera compañía lírica profesional andaluza con más de 10 años de trabajo sobre los escenarios. Con esta iniciativa rescata una obra olvidada en el tiempo, pero que tuvo gran éxito en su día.
Como la zarzuela es de corta duración, se han añadido otros números musicales que, o son malagueños, o bien tratan de Málaga de alguna forma. Se trata de un sentido homenaje a muchos compositores malagueños que todavía hoy son desconocidos por buena parte del público: Lemberg, el cancionero de Ocón, obras de Manuel del Campo o del propio director musical de TLA, Arturo Boscovich, con las que se completan dos horas de espectáculo musical.
