El pasado 11 de febrero tuvimos la oportunidad de presenciar una estupenda noche de música teutona en el teatro monumental con la Orquesta y Coro de RTVE. Llevaba la batuta el ya entrado en años Pinchas Steinberg. Lo hizo con brío y entusiasmo, obteniendo un sonido profundo y claro de la orquesta y muy bien equilibrado con el coro.
La velada comenzó con un acercamiento a la Antigüedad Clásica a través de la música de Brahms y textos de Goethe, Schiller y Hölderling. Estos autores formaban parte de un movimiento llamado Clasicismo de Weimar y tenían como referente supremo esa época pasada, lo que teñía sus textos de esa nostalgia típica del romanticismo. Brahms los utilizó para el Canto de las Parcas, Nänie y La Canción del Destino. Una fusión de poesía y música de gran belleza.
Destacó La Canción del Destino en la primera parte, con sus percusivos ta-ta-ta-chan, que anuncian esa llamada a la puerta del destino desde que lo utilizara Beethoven en su 5ª sinfonía. Brahms utiliza este elemento musical para dar colorido al destino, como ya lo hiciera a lo largo de su 3ª sonata para piano. Los contrastes entre las distintas secciones estuvieron muy bien conseguidos y especialmente bellos fueron los pianissimos que obtuvo el maestro Steinberg tanto de la orquesta como del coro.
La orquesta de la RTVE cuenta con el gran privilegio de tener a su disposición a su coro homónimo, con el que puede abordar este repertorio menos habitual en las salas de conciertos. El coro cantó estupendamente, con un gran trabajo de Javier Corcuera.
En la segunda parte nos dirigimos hasta las tierras del Rhin, con la Sinfonía nº3 de Schumann, la llamada renana, por su carácter descriptivo de los ambientes y la atmósfera de esta zona. Fue una magnífica versión, con tempos cómodos bellos colores y gran claridad en sus líneas melódicas.
Mario Nieto
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