Crítica: Recital de Renée Fleming y Eugeny Kissin en La Scala

Renée Fleming Eugeny Kissin Scala Por Bernardo Gaitán

Renée Fleming y Evgeny Kissin en La Scala: un ‘doble recital’ 

Se podría decir que en el mundo de la música existen dos tipos de recitales: el que ofrecen las generaciones jóvenes -programas llenos de virtuosismo con la intención de impresionar al público y permanecer en la memoria colectiva gracias a la bravura de los intérpretes-; y los ‘recitales de mero placer’ que solamente consumados interpretes pueden darse el gusto de programar. Renée Fleming Eugeny Kissin Scala

 

Evgeny Kissin y Renée Fleming en La Scala milanesa / Foto: © Brescia & Amisano
Evgeny Kissin y Renée Fleming en La Scala milanesa / Foto: © Brescia & Amisano

La noche del 26 de enero, el Teatro alla Scala programó un recital de esta última categoría, y en partida doble pues no se trataba solo de un consumado artista en el escenario, sino dos grandes luminarias internacionales: la soprano Renée Fleming -quien regresó al teatro milanés después de casi 15 años- acompañada al piano por el pianista Evgeny Kissin quienes ofrecieron un doble recital sui generis para los estándares del teatro lombardo.

Para quien esperaba poderosas arias de ópera, agitadas cabalettas o el clásico repertorio de soprano-hits, se llevó una más grata sorpresa pues en su lugar se vivió un recital íntimo, verdaderamente lejano de la pirotécnica habitual, con un contenido meramente Liederistico que llevó al público a un éxtasis de interioridad. Pieza tras pieza, los suspiros de quien asistió al concierto se fundían con la emotiva música en una etérea realidad. Kissin y la Fleming -ambos con más de 30 años de carrera- están en un momento de su vida donde no necesitan impresionar a nadie, pueden darse el lujo de programar lo que quieran y abordar el programa con madurez y sabiduría, diferente a como lo haría un cantante con 30 años de edad.

Recital de Renée Fleming y Evgeny Kissin en La Scala / Foto: © Brescia e Amisano / Teatro alla Scala
Recital de Renée Fleming y Evgeny Kissin en La Scala / Foto: © Brescia e Amisano / Teatro alla Scala

Engalanada en un elegantísimo vestido carmesí, la soprano estadounidense especialista en música camerística abrió la noche con cuatro Lieder de Franz Schubert: Suleika, Die Vögel, Lied der Mignon y Rastlose Liebe. Su dicción del alemán por desgracia no fue tan espectacular como su vestuario, pero la intención siempre estuvo presente. Para continuar el programa, una joya para los apasionados pianísticos, pues el pianista moscovita naturalizado británico, ofreció como solista Sposalizio de la suite Années de pèlerinage: Deuxième Année: Italie (Años de peregrinaje: Segundo año, Italia) y el Valse n. 1 para piano solo proveniente de los Quatre Valses oubliée, ambos de Franz Liszt. Aquí, Evgeny Kissin mostró la regia maestría que posee al interpretar un Liszt introspectivo que es igualmente demandante técnicamente que el pirotécnico y explosivo al que estamos acostumbrados.

La versatilidad de Kissin es extraordinaria, pues demostró ser igualmente capaz como pianista solista, tanto como acompañante de cantante. Un pianista acompañante debe anteponer el lucimiento personal a los requerimientos técnicos que conlleva sostener a su cantante. Cuando la Fleming cantaba, Kissin la seguía, cuidaba el volumen, y se preocupaba por estar siempre en sintonía con ella; pero cuando llegó Liszt, más allá de elevar el volumen de su impecable toque, llenó la sala con su aura disfrutando cada tecla que oprimía, como si se tratara de otra persona diferente a quien acompañaba el resto del programa vocal.

Para terminar la primera parte del programa, la soprano quien participó hace unas semanas en el estreno mundial de la ópera The Hours de Kevin Puts en la MetOpera de Nueva York, ofreció tres canciones de Liszt: Freudvoll und Leidvoll, Über allen Gipfeln ist Ruh e Im Rhein, im schönen Strome, todas con pasión y sentimiento. Cabe mencionar que al evento se dieron cita varias personalidades de la lírica como las sopranos Marina Rebeka (quien está en Milán para interpretar en febrero I Vespri siciliani), Eleonora Buratto (quien prepara Les contes d’Hoffmann de marzo) y el pianista Giulio Zappa, quienes aprovecharon el intermedio para elogiar a los consagrados artistas.

Tras la pausa, portando ahora un vestido dorado aún más vistoso, la diva americana fue recibida entre aplausos y hurras para interpretar las romanzas: Lilas Op. 21 n. 5 y Un sueño Op. 38 n. 5 de Sergei Rachmaninov. Del mismo compositor ruso, su compatriota pianista interpretó del ciclo Morceaux de fantaisie Op. 3 las piezas: Melodía y Serenata. El nivel técnico del pianista -ausente en la Scala desde hace 12 años- es indiscutible, pues ejecuta fraseos y legatos de manual, así como las pocas agilidades que requería el programa fueron ejecutadas con gran precisión. Posteriormente, un par de piezas en francés nuevamente de Franz Liszt: S’il est un charmant gazon y Oh! Quand je dors que sirvieron para que la brillante y mórbida voz de la diva americana continuara luciéndose.

Recital de Renée Fleming y Evgeny Kissin en La Scala / Foto: © Brescia e Amisano / Teatro alla Scala
Evgeny Kissin y Renée Fleming en La Scala / Foto: © Brescia e Amisano / Teatro alla Scala

Sin ningún sobreagudo o explosivo final, el programa concluyó con dos piezas del compositor francés Henri Duparc: Extase y Le manoir de Rosemonde que gracias al desbordado público, que aplaudía y gritaba de emoción desde la platea hasta el loggione, la pareja de músicos ofreció tres encores. Primero una solemne Ave Maria de Schubert, seguido de un movido Lied de Rachmaninov, pero fuera de lo común fue la inolvidable Morgen de Strauss, que envió a sus casas, flotando en una burbuja de paz y tranquilidad, a todos los asistentes.

El regreso de la Fleming y de Kissin al teatro se trató de uno de los eventos más esperados tanto por los melómanos milaneses, como por la gran cantidad de extranjeros que pudieron vivir este momento. Este recital forma parte de una tournée iniciada en Viena. Tras Milán viene Paris, Ámsterdam, Chicago, Los Ángeles, Verbier y Salzburgo.

Esperamos que este extraordinario dúo regrese pronto -ya sea juntos o por separado- para volver a encantar con su talento al público italiano.


Milán (Teatro alla Scala), 26 de enero de 2023. Renée Fleming, soprano. Evgeny Kissin, piano. Renée Fleming Eugeny Kissin Scala

Obras de Schubert, Liszt, Rachmaninov, Duparc y Strauss.

OW