Perez- Pouilleux. Wagner transformó el mundo de la ópera

“Transformó el mundo de la ópera”

Por Carlos Vieu *

Como músico profesional y como público habitual de las salas de opera y concierto, estoy acostumbrado a la modalidad que, cada vez que se conmemora un aniversario relacionado con la existencia de los grandes creadores del arte musical, es esperable y habitual que una serie de eventos se produzcan en homenaje a la figura. Así, naturalmente la programación de sus composiciones y obras obtienen un incremento notable en toda programación artística de Teatros y Orquesta, y los homenajes y citas alusivas a los diferentes compositores se hace muy frecuente. Esta temporada 2013, reúne una serie de nombres muy importantes para recibir estos homenajes y valoración, consecuencia de la herencia que legaron a la humanidad y de su peso histórico-musical. Verdi y Wagner son algunos de ellos. En esta semana nos ocupa el segundo nombre mencionado: Richard Wagner, quien dejara su marca de fuego con enormes aportes a la evolución del lenguaje musical y teatral, con su ideología y concepción de una autentica opera alemana de resonancia mundial. Hace 200 años nacía este genio de la música.

Seguramente los datos biográficos y la literatura Wagneriana serán citados por demás por estos días de festejo, por lo cual se me ocurre a modo de complemento, citar la relación del compositor con la ciudad de La Plata, ya que salvo emprendimientos mas humildes como la incorporación de fragmentos o sus preludios y coros en varios conciertos de la historia del Teatro argentino, es de reciente época la ejecución de títulos enteros de producción propia.

Quien escribe, tuvo la dicha de debutar en esta querida sala en Diciembre de 1997 con una gala Verdi- Wagner, justamente dos de los músicos homenajeados en 2013, y desde ese momento ya se hablaba de que con la inauguración de la nueva sala (que por esos años del Cine/Teatro Rocha se esperaba fervientemente) podría producirse en algún momento la incorporación a las Temporadas Líricas un titulo Wagneriano. En realidad, en el año 1952, Lohengrin había sido el primer intento, pero se había cantado en Italiano. Recién 59 años después de ese Lohengrin, la gestión anterior de nuestro Teatro programo y puso en escaña una de la mas sublimes paginas de la literatura Wagneriana: Tristán e Isolda, con puesta de Lombardero y batuta de Perez- Pouilleux. El gran desafío artístico genero una gran expectativa y así, la Sala se colmo de gente que disfruto de el primer evento en la historia en que Wagner se cantaba por fin en su idioma original. Luego vendría la primera de la operas de la famosa Tatralogia, que como todos sabemos, ha quedado en suspenso por motivos financieros, pero que de todos modos, y reiterado el exijo en El Oro del Rin, ha dejado huella para que a futuro (esperemos no lejano) se retome la idea de completar el ciclo, generando así una nueva y enriquecedora relación del genio alemán con el publico platense. En esta temporada de transición, en que un nuevo equipo tratara de retomar el nivel y la expectativa de espectáculos del Argentino hacia 2014, y mientras se continua con el ciclo de conciertos (que a sala repleta ya va por su sexto concierto, incluidos aquellos en ayuda a los damnificados por la ultima inundación), el renovado y efusivo manifiesto del publico con su entusiasmo y aplauso sostenido, nos dan pie para tener la firme esperanza de que el Argentino, con el apoyo de los máximos responsables políticos de la cultura bonaerense se recupere y vuelva a esos días de brillo. De todos modos no podían faltar Verdi y nuestro homenajeado de esta semana, el gran Richard Wagner, de quien se podrá oír por primera vez en La Plata su Holandés Errante, que subirá a escena en Octubre con la batuta de quien suscribe y puesta del Francés Louis Desire. Contamos para ello con un gran elenco y mientras nos preparamos entusiasmados con el proyecto, rendimos justo homenaje a este genio de la música que transformo el mundo de la opera y se animo a dar un paso adelante de sus predecesores en estilo, calidad y visión de futuro. Después de Wagner el genero lírico ha sufrido una notable evolución por influencia de su estilo y ha marcado un sello propio dentro de la literatura operística mundial. Festejemos entonces que en tiempos actuales no se olvide a estos enormes compositores que nos enriquecen la vida cada vez que suena su música.