Crítica: «Yo te querré» del Proyecto Zarza en el Teatro de la Zarzuela

Crítica: «Yo te querré» Zarza Por Federico Figueroa

¡Todo está horrible!

En mitad de Yo te querré, Sigor Schwaderer, en su papel de director, le comenta a Sylvia Parejo, la escritora, refiriéndose al libreto que ella está esbozando: “¡todo está horrible!”. Y no puede tener más razón… Esta séptima entrega del “Proyecto Zarza” no había por dónde cogerla. Sin duda ha sido el peor de los espectáculos presentados hasta ahora en esta meritoria iniciativa. Atraer público joven al Teatro de la Zarzuela ha sido una de las grandes batallas de su director artístico, Daniel Bianco, y se puede decir que esta meta se ha alcanzado. Los adolescentes de institutos de toda España, preparados previamente con un buen material didáctico, acuden en gran número a las funciones Zarza -de hecho todas las entradas se venden en un tiempo récord- y además la pasan bien y vuelven a casa queriendo emular a los protagonistas de la obra. Pero claro, a los jóvenes también les encanta ir a los restaurantes de comida rápida. Crítica: «Yo te querré» Zarza

Una escena de "Yo te querré" / Foto: © Javier y Elena del Real
Una escena de «Yo te querré» / Foto: © Javier y Elena del Real Crítica: «Yo te querré» Zarza

El “Proyecto Zarza” nació para el público en 2017, con una propuesta de La Revoltosa que sorprendió y consiguió ilusionar a los que amamos este género lírico. Había energía, juventud y pasión. Se echó en falta, eso sí, la presencia de voces líricas, que haberlas las hay en conservatorios y escuelas de canto. No obstante, pensamos que ese punto podría cambiar en las siguientes ediciones. No fue así, más bien todo lo contrario; observamos una cierta autocomplacencia en este modelo, una falta de autocrítica que, en mi opinión, ha desembocado en el fiasco de Yo te querré. Un dato: de los 18 jóvenes cantantes que han participado en esta edición, cuyos edades oscilan entre los 18 y 30 años -el límite para presentarse al proceso de selección- ocho ya lo habían hecho en años anteriores. Los centenares de aspirantes (más de 800 según datos del propio teatro) a formar parte de este proyecto, tengan formación lírica o no, ven sus opciones de ser elegidos mermadas o al menos juegan con la desventaja de competir contra caras ya conocidas. 

Centrándonos en lo que vimos el otro día, Yo te querré se presenta como un homenaje al maestro Francisco Alonso, suponemos que a su música. No obstante, esta queda emborronada en medio de una dramaturgia de nueva creación, firmada por Lola Blasco, que resulta tan insulsa como irrelevante. Ni el buen hacer de José Luis Arellano, el director de escena (y también repetidor en el “Proyecto Zarza”) ni la entrega de los 18 jóvenes artistas logran que la obra levante el vuelo. El homenaje se queda a medio camino de ser una comedia musical, pues ni tiene gracia, ni resulta musical, ni termina de resolver su prejuicios contra el universo de la revista, que retuerce con personajes poco creíbles y lugares comunes de la nueva ideología de género y de lo políticamente correcto. Rescatable la escenografía de Pablo Menor Palomo y la iluminación de Juanjo Llorens

Julia Adun, Adrián Quiñones y Soraya Méncid en una escena de "Yo te querré" / Foto: © Javier y Elena del Real
Julia Adun, Adrián Quiñones y Soraya Méncid en una escena de «Yo te querré» / Foto: © Javier y Elena del Real

La atenta dirección musical de Lucía Martín, desde el piano, tampoco fue suficiente para animar unas voces que dan para lo que dan, llegando a «resultonas» en el mejor de los casos. Voces, en su mayoría, de limitada proyección, poco coloreadas y más propias del mundo del musical de ahora, el de versiones de grupos famosos de los 80, no el musical clásico de la época dorada. Los ocho músicos (violín, viola, violonchelo, contrabajo, clarinete, acordeón, percusión y piano -discutible también esa selección de instrumentos-) las llevaron con suavidad, en unos arreglos que tampoco ponen de relieve el valor de la música del maestro Alonso, que queda como si de un insípido bocado se tratara, o de una hamburguesa barata, por seguir con el símil del fast-food. De los dieciocho cantantes solo Adrián Quiñones (El barón) exhibió maneras para poder dar el salto a una zarzuela “de verdad” en el escenario de la calle Jovellanos. Pero teniendo en cuenta que, tras seis ediciones y habiendo pasado más de 100 artistas por el Proyecto Zarza, solo cinco o seis  de ellos hayan hecho esa transición tampoco nos vamos a llevar las manos a la cabeza. 

Una escena de "Yo te querré" / Foto: © Javier y Elena del Real
Una escena de «Yo te querré» / Foto: © Javier y Elena del Real

¿El Proyecto Zarza se nutre de los musicales de la Gran Vía o viceversa? ¿Qué pasará con él cuando en noviembre aterrice una nueva persona en la dirección del Teatro de la Zarzuela? Ojalá y se mantenga, pero con un nuevo rumbo, más acorde a la esencia del género, y en esto debemos ser claros: la zarzuela no fue nunca casposa ni aburrida. La zarzuela expuso en los escenarios la realidad social de su momento, llevando a todas las clases sociales a verse reflejadas a sí mismas sobre las tablas. El Teatro de la Zarzuela ya ofrece, desde hace décadas, propuestas con visiones contemporáneas y, como sucede en la ópera, un sector del público patalea y otro aplaude. En esta dinámica radica el futuro de la lírica. En disfrazarse de otra cosa y rebajar la calidad hasta rayar en la ramplonería, ahí no radica más que la desolación. Crítica: «Yo te querré» Zarza

Una escena de "Yo te querré" / Foto: © Javier y Elena del Real
Una escena de «Yo te querré» / Foto: © Javier y Elena del Real

Y volviendo al homenaje a Francisco Alonso, ¿de verdad no era posible tomárselo en serio? Los números musicales de Yo te querré, extraídos de obras como A La Habana me voy, Las de Villadiego, La cautiva o Tres días para quererte no son, desde luego, los más representativos del corpus del maestro granadino. En 2018 se vio en esta casa una buena producción de ¡24 horas mintiendo!  y en 2015 aplaudimos con entusiasmo la  Luna de miel en El Cairo, por lo que, sinceramente, los aficionados a la zarzuela no nos esperábamos esto. Y es que además, Alonso es autor de una de las revistas más populares, Las Leandras, y de un título menos conocido pero que también podría conectar con un público juvenil, me refiero a Las corsarias. Una versión actualizada de cualquiera de las dos habría sido más pertinente para un homenaje sincero al compositor y estoy seguro que los chicos y chicas del Proyecto Zarza le habrían sacado más lustre que al indigesto Yo te querré. Crítica: «Yo te querré» Zarza


24 de febrero de 2023, Madrid (Teatro de la Zarzuela).   Yo te querré   Música: Francisco Alonso   Texto hablado: Lola Blasco   Nueva producción del Teatro de la Zarzuela en el marco del Proyecto Zarza.

             Dirección de escena: José Luis Arellano         Dirección musical: Lucía Marín

Solistas: Sylvia Parejo, Sigor Schwaderer, Adrián Quiñones, Claudia Bravo, Tony Iniesta, Eduard Maruri, Nacho Zorrilla, Sandra Fergadi, Laura Pont, Aarón Montes, Andro Crespo, Albert Díaz, Luis Huete, Lucía Valencia, Soraya Méncid, Thalía Garrido, Julia Adun, Carmen Raigón.

OW